Nuestra historia se remonta a la generación que actualmente dirige la bodega que desde el 2002, ha conseguido consolidar su producción, obteniendo reconocimientos y premios en todas sus marcas. Un proyecto hecho realidad lleno de ilusión, trabajo y empeño. Una bodega de carácter familiar; sencilla y humilde, con unos vinos de carácter muy marcado y definido, con personalidad propia. “Elaborar vinos para el disfrute no para la cata”, es la máxima de la bodega. Cinco marcas de vino definidas, para encontrar en cada una, ese momento especial de conversación y reflexión. Con una familia tradicionalmente agrícola, en 1940 plantan las primeras viñas, con las que se elaborarán los primeros vinos para consumo propio. A partir de 1985 empiezan a vender la producción de uva a bodegas afamadas de la Ribera Del Duero. Hasta que, en 2002, nace Bodegas y Viñedos Vega de Yuso. Inicialmente con una mínima producción, es en 2003 cuando sale al mercado el primer Vegantigua 2003 y en 2005 saldrá el primer TresMatas Crianza 2003. Ambos fieles desde el principio al tipo de elaboración tan característico de la bodega. Vegantigua 2003 consigue la Medalla de Bronce en los premios Baco 2004. y también recibirá premio el TresMatas Crianza 2003, 2º Premio al Mejor Crianza en los Premios Envero del 2006. Un sueño hecho realidad para Rubén Iglesias, Gerente y Enólogo que, junto a su familia, la Familia Medrano Martín, recoge el legado familiar y lo convierte en su proyecto personal: Bodegas y Viñedos Vega de Yuso. Emplazada en Quintanilla de Onésimo, provincia de Valladolid, pueblo de la Milla de Oro de la Ribera del Duero, a 21 km de Peñafiel y a 35 km de la capital. El nombre de Vega de Yuso tiene su origen en la ubicación del propio pueblo en las orillas de la Vega del Rio Duero y Yuso es parte del nombre original del pueblo, que era Quintanilla de Yuso en sus orígenes. Veinticinco hectáreas de Tempranillo con las que se elaboran cinco marcas que se posicionan en el mercado, compitiendo con los mejores de su gama. Pozo de Nieve, un joven frutal y fresco con al menos 4 meses de barrica. Vegantigua, es un vino joven roble, redondo y sorprendente, que envejece un mínimo de 10 meses en barrica. TresMatas Crianza, el vino emblema de la bodega, que destaca por su elegancia y estructura. Se elabora con viñedos de media edad y lleva una crianza de al menos 18 meses en barrica. TresMatas Reserva, se trata de un vino elaborado con viñas de más de 45 años. Lleva una crianza de al menos 26 meses en barrica de roble francés, lo que le aporta a este vino, una complejidad estructural muy elegante. Y, por último, el capricho de Rubén, TresMatas Vendimia Seleccionada, elaborado solo en añadas excepcionales, con uvas procedentes de un único pago, el más antiguo de la bodega. Se le realiza una crianza en barricas francesas de gama alta de grano extrafino, durante al menos 24 meses. Es un vino de autor expresivo, estructurado y complejo, apto todos los paladares.