En Bodegas Honorato Calleja hacen un mantenimiento excelente del viñedo a lo largo de todo el año para poder disfrutar de una uva de gran calidad; tareas como el aclareo de racimos y deshojado, entre otras, aporta un plus en calidad.
Realizan una vendimia manual con selección de los racimos en viñedo y en bodega.

Apuestan por una técnica para la fermentación y elaboración denominada OVI con puente grúa. El OVI un pequeño depósito que se llena de claros, con el puente grúa se sube hasta la boca del deposito y abren, cae todo rompiendo el sombrero por gravedad, con un tratamiento mejor de la uva y el mosto, más limpio y sano, tarea que en el periodo de fermentación la realizan dos veces al día, una por la mañana y otra por la tarde. Después de cada rematado, tienen un control exhaustivo de densidad y temperatura de cada uno de los depósitos. Intentan que todas las tareas posibles sean por gravedad (OVI) ya que se trata mejor la uva y el mosto, por eso el descube también es manual, y el prensado con presiones muy leves.

Realizan la fermentación maloláctica en depósitos de acero inoxidable, menos el Honorado que la fermentación maloláctica la tiene en barricas de roble francés.

El vino llega a barricas para su envejecimiento, roble 5 meses en barricas de roble francés y americano; crianza 15 meses en barricas de roble francés; y Honorato 24 meses, barricas de roble francés.

Clarifican con productos naturales no alérgicos, y filtraciones suaves previos al embotellado. Embotellan, y el vino envejece en botella desde 3 meses para el roble hasta 12 meses para el Honorato.